viernes, 21 de enero de 2011

Sueños o pesadillas que van a la realidad


Es increible como el calor que sentimos nos influye para nuestros sueños y es que cuando tenemos calor suceden en nuestra mente las más horribles pesadillas.
Sin embargo el frio no nos hace tener pesadillas. Me pregunto por qué será..

Los radiadores de mi casa están mucho más que ardiendo y la noche empezó con una pesadilla que ya había visto antes. Por alguna razón creo o creía mientras soñaba que era una pelicula. Ahora mismo no sé sí era eso o era una pesadilla anteriormente tenida.

La pesadilla se desarrollaba en una especie de Carrefour deshabitado, gris, polvoriento, y viejo. Parecía como una fabrica, como la del chico de jumangi. Alli viajaba en el tiempo mientras trataba de salvar a una niña pekeña que creo ke era la niña de matilda.
había estantes como de carrefour en algunas columnas y luego unos pasillos muy largos que iban de un extremo al otro del edificio.
También había un tipo que por alguna razón estaba muy muy enfadado conmigo. Los viajes en el tiempo me llevaban a esa misma fabrica en la que había muchísima ropa y la gente circulaba de compras por todos los pasillos mientras este tipo se dedicaba a seguirme y mirarme con cara de pocos amigos a la vez que yo me escabullia entre la ropa y los percheros.

No sé que mágia poseia pero por uno de los pasillos, cuando me vio practicamente en él me lanzó una llamarada increible que conseguí esquivar mientras me agachaba y me echaba hacia delante. Aun así notaba el calor, tal y como mi cuerpo notaba el calor de mi casa.

No recuerdo mucho más de ese sueño porque la angustía de la mirada fulminante y las ganas de matarme de ese tipo, me acabaron despertando y me di cuenta de la realidad.

aún así cuando te acuestas a la 1 y media de la madrugada, lo que más te apetece hacer a las 6 y media de la mañana es dormir, asíque como es lógico no puse ningún impedimento en ello y quedé frita de nuevo.

Recuerdo varias cosas. La primera era que andaba buscando no sé qué y que sólo podía conseguirlo al día siguiente en el expoocio. Pero resulta que me transporte hasta alli y vi el final de una feria que casualmente era el expoocio aunque los chicos de los estantes (el canta en los melocos) me dijo que abrían al día siguiente. Con las mismas pude darme cuanta de que no encontraría lo que quería asíque salí pero no era una puerta de expoocio. Eran unas puertas como de dicoteca-tienda como la que hay en los sims con palanca de cuerta de seguridad para empujar. Y salí por allí hacia la calle donde me encontré a dos niñas con su familia. Al parecer nos conociamos y mucho! aunque no tengo ni idea de quienes eran jaja. Les explicaba que no sabía sí había metro. Era algo así como que yo sabía que me había teletransportado pero que no estaba en madrid. sin embargo sí que había metro, detras de un parque que al caer la noche se hizo muy peligroso.

En el suelo pase por el parque este junto con otro chaval que me dijo que también tenía que ir al metro y yo le dije que sola no iría.
no sirvió de nada porque comenzaron a seguirnos para violarnos.
El caso es que nos seguian y en el parque había estanterías con libros!! que se los poníamos de impedimento para que no nos alcanzasen, o se los tirabamos. Les abrimos de piernas con golpes secos manuales.. pero aún así eran como zombies que siempre volvían. Después aparecimos en una especie de habitación que no estaba cerrada pero que tenía una ventana que detrás tenía un cielo azul de día! y era de noche realmente!! y en esa habitación me alcanzó el "caco-violador" que a mí me seguía. Había 3, dos chicos y una chica. Casualmente el chico, me he dado cuenta hace un ratín de que es un chaval ya adulto del CES que estudia EF y que parecía mayor. Moreno y tal. Coincidimos en la biblio hace un par de días. Aunque no lo conozco de nada más.

La cosa es que me alcanzó en esa habitación pero le di un golpe en la cabeza que lo dejó inconsciente y se me ocurrió la genial idea de tocarle la puntita de su miembro ya que a los hombres eso les duele más que cualquier otra cosa en el mundo. Asíque procedí, le tome de piernas, baje su bragueta, calzones, abrí y contra la pared. Sentí por fin que ya había vencido con eso que hice.

Pero lo asombroso vino entonces porque no recuerdo por qué de repente escupí, y curiosamente en la realidad también. Desperté al instante partida de la risa. De hecho aún me parto jajaja. Gracias a Dios la saliva no tomó forma ni llego a salir de mi boca tanto como lo hizo en el sueño porque me imagino la situación jajajaja.

Vaya tela!!