La verdad es que resulta agradable llegar y que estés preparado, que me cuentes tus cosillas y quieres enseñarme tu mundo. Me gusta que me veas como un igual aunque tratandome con respeto. Me gusta que te dé descanso y en lugar de invertirlo para separarte de mí, te marchas y me llamas para que te acompañe. Y cuando toda la tarde acaba me regalas un gracias, una sonrisa, e incluso un trozo de tarta hecha por tí porque el miércoles fue tu cumpleaños. Y después cuando me tengo que marchar me vuelves a regalar una sonrisa, un gesto con la mano y un adios o hasta luego.
Resulta súper agradable pasar así las tardes y ver como vas mejorando aunque te hagas un poco el vaguete a veces.
El hecho de que siempre me recordases a mí supongo que te dió puntos a mi favor. Puntos que aumentan con el paso de los días y el cariño que nos vamos cogiendo.
De corazón que espero que mejores con todo esto y que no sólo las tardes así nos sirvan para encontrarnos y disfrutar de la compañía del otro, sino que además aprendas y saques aquellas notas que tu madre espera y desea que saques.
Por ahora, "rezaré" porque tus notas de estos dos días hayan sido buenas y si no es así, me seas sincero para juntos solventarlo sin necesidad de pasar por las llamas de tu madre! jajaja.
Eres genial chiquitín. Espero que te vaya bien, de corazón.
Gracias por tu tartita rica, y por tu grata compañá, tu obediencia y saber estar a pesar de distraerte cuando te cansas. Dos horas son muchas horas para todos =)
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