miércoles, 6 de agosto de 2014

Parece un adiós..

Esta será la primera entrada que vaya acerca de esto.. el principio del fin.
Para poner en circunstancia la entrada diré que el 20 de julio en lo que a un inicio me pareció una pregunta sin importancia.. me dejaron. 
Tras ese día las conversaciones con ella fueron un convencimiento, tanto para ella misma como para mi. Sí, es cierto que las cosas estaban así; era cierto que teníamos objetivos distintos, que ella quería que viviéramos juntas ya y yo por el contrario, no tenía prisa por salir de casa de mis padres.
Es curioso porque, con el paso del tiempo, eso junto con aquello de.. "te quiero mucho y por eso dudo de si me pesan tanto mis objetivos como para dejarte" me ha hecho ver y pensar que.. una pareja no se rompe si verdaderamente no crees en ella, si verdaderamente todo, sin excepción, se ha perdido.
Supongo que veía esto como un matrimonio y me colmé de paciencia tantas veces y en una cantidad tan enorme que esperaba que tú hicieras lo mismo, y sin embargo.. no ha sido así. 
Dices que te has esforzado, que has dado todo de ti, por que tú eres de darlo todo en una relación, pero yo no empecé a dejar de darte hasta ese 20 de julio, e incluso tras este, te he seguido dando, porque te quiero..

Ahora te has marchado, y todo es distinto, y no sé si volverás pero.. quiero que las cosas cambien. Quiero sentir que de verdad te importa, que de verdad crees en esto y que de verdad, y no sólo por que lo dices, haces por que esto funcione.


Tal vez me guié por estos últimos días pero.. has cambiado tanto.. que incluso se tambalea mi creencia en ti. Continuamente ignorabas mis quejas sobre tu constante manejo del móvil.. volviste a fumar.. y aun flojo, me pegabas e incluso lo excusabas con un "me has enfadado". Algo que me hace dudar de si vas a hacer eso siempre que suceda un enfado, porque ya te pasé una vez que me tirases una pinza con fuerza a la pierna y lo siento pro no pasaré más en ese campo. 
Te contesté ante esa frase que dijiste, que yo también me he enfadado muchas veces, por verte con el móvil, y aunque me dijiste que tenía razón y que no podías decirme nada, dos horas después, justo de camino a la estación y en la misma estación por la que partías, seguías ignorándome porque no soltabas tu teléfono.
Y yo qué hago? si todo cuanto haga da igual..

Eres libre y.. supongo que de ti han de salir las cosas. 
Alguien me dijo.. no puedes hacer que cambie por ti. Ha de cambiar por si sola, y si no quiere cambiar.. no lo hará. 
Me costó escuchar eso, sobre todo porque pude ver en mi mente, mientras me costaba tragar, que se había acabado entonces esa oportunidad que te daba constantemente.
Ambas tenemos pegas, ambas hemos pasado por mucho y ambas hemos tenido mucha paciencia, y nos hemos esforzado.


Te he colmado de regalos, te he ayudado en todos los sentidos, hasta he cubierto tus antojos.. siento que he dado tanto.. y tu no lo valoras. Todo tirado por la borda porque tuviste una discusión con mi madre y su hermana porque te metiste conmigo delante de ellas de una forma un tanto peculiar. Pero tú no lo ves. Piensas que lo dijiste para mi solamente, y que lo dijiste perfectamente, nada de provocaciones. Al igual que también ves que ellas te comieron cuando tan solo te dijeron, textualmente "no hay que reprochar nada" parando aquel comentario que hiciste sobre mi. Pero como tú bien dijiste, ya esto venía de antes, y es que tu desilusión era enorme desde mayo cuando mi estado de mamitis te hundió porque pensabas que íbamos a hacer un cuento de hadas donde en junio del año próximo como muy lejos, viviríamos juntas.

Nunca voy a entender esas prisas, prisas que para ti no son prisas y son cosas normales que todos aquellos con los que hablas (que no sé quienes serán) te han dicho que harían. Algo que me alucina completamente porque, todos con los que yo hablo, me dicen que esas prisas son actualmente una locura absoluta.

Estoy un poco enfadada a la par que dolida. Siento que tu forma de ver la vida, no es para nada mi forma de verla, y ya no solo por cuestión de objetivos. Te veo una niña en muchas ocasiones, y yo.. me veo tu madre en esos casos. Veo que me reprochas que no hago por esto y sin embargo.. no pensamos igual. Exactamente.. no pensamos igual.. y es muy complicado todo cuando no se piensa igual.
Por eso estamos aquí, está claro..

Pienso en las veces que has dicho que esto no lo quebrarías. Que sería yo quien lo haría. Lo prometías. Hay tantas cosas que has prometido mientras estabamos juntas y que no cumpliste.. tantas cosas que deje de creer en tus promesas aunque seguia creyendo en esta, porque la veía tan fuerte.. tan grande, que suponía que sería la unica que quebrarías, pero me equivoqué.
Parece que me he equivocado en muchas cosas en este ultimo año y medio.. Y sonará todo esto victimista, realmente, no puedo hacer nada, soy victimista, y lo reconozco, pero es cierto que también reconozco otras cosas y.. creo que aun con esta visión de victima, estoy siendo realista.


Aún con todo esto.. el día a día es difícil, es difícil todo porque sobre todo, te quiero y si fuera por mi.. seguiría luchando como dije que iba a hacer y como supuestamente continuo haciendo.. Cierro los ojos intentando calmarme, intentando darte ese tiempo que necesitas, sin prestar atención a los constantes daños que siento cada vez que te leo en facebook una de esas despedidas. Cada vez que veo que no me escribes ni me dices nada, aunque antes hablabas conmigo casi las 24 horas por whasap.
A veces pienso que es lo mejor y que lo que tenga que ser, será y ya me haré a la idea, como trato de hacer a cada minuto. A fin de cuentas, la pelota está en tu tejado y tampoco he de forzarte a quedarte cuando verdaderamente no lo sientes.
Veremos en que acaba todo esto..

No hay comentarios:

Publicar un comentario